Alimentación y dolor
Determinados hábitos alimenticios mantenidos durante largos periodos de tiempo son capaces de deteriorar nuestro organismo dañando nuestros órganos, alterando su función y empeorando la calidad de los tejidos que nos constituyen.
La elasticidad y correcta función de nuestras articulaciones, la intensidad del dolor secundario a procesos degenerativos e inflamatorios y la presencia de dolores referidos de origen visceral en el organismo depende, en gran parte, de aquello que ingerimos.
El estudio de los citados hábitos alimenticios de los pacientes permite al terapeuta manual ampliar las posibilidades de llegar a un correcto diagnóstico y en consecuencia a un tratamiento más efectivo.
Desde hace ocho años Fisioterapia Santalla viene dando charlas al respecto de la relación existente entre el dolor osteo-articular y el mantenimiento de determinados hábitos alimenticios en diferentes asociaciones, clubs deportivos, gimnasios, colegios, etc… con el fin de divulgar el conocimiento de este hecho entre la población e intentando con ello promover buenos hábitos que mejoren la salud de las personas.
Las charlas se dan de manera gratuita y solo hay que contactar a través del teléfono para su contratación.